¿Tienes dudas?
La respuesta corta es que sí, es posible cargar un coche eléctrico en un enchufe normal, con el cargador que incluye el vehículo. Ahora bien, hay una serie de cosas a tener en cuenta, partiendo de que el cargador que viene con el coche está considerado de tipo 2, tipificado como “ocasional o de emergencia”. Esto significa que solo deberías conectarlo a un enchufe convencional en ocasiones muy puntuales en las que no tengas ningún punto de recarga cerca.
Para empezar, enchufar un coche eléctrico en casa, en un enchufe de los que ya tenemos (conocidos como “Schuko”), nos dará lo que llamamos una recarga lenta. Como en estos enchufes podemos llegar como máximo a 2,2 kW de potencia o a 10 amperios, necesitaremos más tiempo para el mismo nivel de carga, respecto a un enchufe de recarga para vehículos eléctricos, que puede llegar hasta los 32A (7,4kW), lo que reduce muchísimo el tiempo de recarga.
Más allá de la incomodidad del tiempo invertido en la recarga lenta, si hablamos de un vehículo 100% eléctrico, la opción de cargar el coche en un enchufe normal estaría desaconsejada, por varios motivos. El primero de ellos sería la vida de la batería. Y es que tomando como referencia un coche totalmente eléctrico con 40kW de capacidad de batería necesitaríamos unas 20 horas para cargarlo por completo, algo que iría estropeando la batería. Si el vehículo está tantas horas cargando la batería se calentará demasiado y si esto se convierte en una constante, probablemente acortará los ciclos de carga y descarga.
Por otro lado deberíamos tener en cuenta que enchufar el coche eléctrico en casa, en un enchufe normal, puede suponer un peligro para nuestra seguridad. Y esto es así porque puede que el cableado tras la toma de corriente no esté dimensionado para cargar a su máximo (10 amperios) durante tantas horas, por lo que puede acabar deteriorándose o incluso quemándose. Además, mientras los enchufes normales de casa suelen estar cerca del suelo, los puntos de recarga para coche eléctrico se instalan en una zona más elevada que permita mantener la toma de corriente seca y protegida en caso de escape de agua o inundación, por ejemplo.
Para ahorrarte tiempo, hemos recopilado algunas de las preguntas que más nos hacéis.
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